Tuesday, March 10, 2009

Carta Abierta A La Mujer Que Amo


















Quizás esta sea la última carta que te escribo sobre el tema,
es probable que las que vienen solo hablen de temas triviales
o simplemente contarán de lo que estoy haciendo o quiero hacer,
escribo esta carta para que de cierta forma
tú sigas con tu vida y yo con la mía,
aunque si de mí dependiera mi vida seguiría junto a la tuya.

Siempre cometemos errores,
lo importante es sacar provecho de estos
pasando en limpio lo bueno y malo para no repetirlos,
limpiando la mente y el alma
para encontrar la limpia verdad de las cosas y emociones,
o por lo menos para acercarse a ella.

Lo urgente es aquietarse,
dejar a las emociones fluir sin forzarlas,
que se muestren espontáneamente
viviendo con ellas pero no en ellas,
aceptándolas como una parte de uno.

Por cosas del destino un día apareciste en mi vida,
después de meses
un día pensé que te amaba,
luego al pasar unos años
otro día pensé que lo que había pensado ya no era,
pero un día después de muchos años y varios tropiezos,
sentí que te amaba y entendí que sentir es distinto que pensar,
aunque desde ese último día
han pasado muchos días, semanas, meses y años,
sigo sintiendo de cierta forma
lo que ese día por primera vez sentí.

Debí habértelo dicho más veces,
debí habértelo cantado en más canciones,
debí habértelo dicho de más formas,
debí haber hecho más cosas.

Hay cosas que no me gusta hacer,
como forzar emociones ajenas y propias,
es por eso que muchas veces he callado cosas,
es por eso que no soy práctico con las emociones,
he aprendido que debo
simplemente sentir y aceptar.

Esta carta, quizás la última carta,
la escribo para cerrar de cierta forma este capítulo,
para que tú sigas con tu vida y yo con la mía,
solo de cierta forma:
ya que lo que siento
no se irá por el simple hecho de escribir,
ni tampoco se diluirá en la distancia,
solo escribo para estar tranquilo:
de que intente contarte todo,
de explicarte todo,
de susurrarte y decirte
que un día hace varios años
después de muchos años,
supe que te amaba.

Solo espero que saques en limpio lo necesario,
que no pienses tanto las cosas,
que sientas lo que tengas que sentir,
que no fuerces tus emociones.

No te pido que contestes esta carta,
ni tampoco te pido que me correspondas,
recuerda que hace muchos años,
desde aquel día después de muchos,
que trato de no pedirte nada.

Te escribo esta carta…
desde el otro lado del mundo…
quizás la última carta…
quizás las ultimas lágrimas mías…
quizás las ultimas lágrimas tuyas...

Tuesday, January 13, 2009

Vaso vacio...



No se trata de ver el vaso medio vacío, lo que sucede es que hay cosas en la vida que se entienden y explican mejor desde el otro lado, desde el punto de vista contrario: de cierta forma uno es todo lo que no es... uno es lo que no ha hecho... lo que no ha logrado... 
Durante un tiempo le di mas de una vuelta a esta idea, potenciada con la lectura de Cortazar y la película "Se Arrienda" (película hecha para el perdedor que todos llevamos dentro...jajaja). Ahora, en otro momento de mi vida llega sutilmente el recuerdo de ese periodo, que curiosamente poseía tintes de optimismo aunque cueste creerlo... soy todo lo que no soy, el que no siguio tocando guitarra como antes, el que no se quedo viviendo en Melipilla, soy el que no soportó ciertas presiones, el que no se quedo vivendo en Talca, el que no dice todas las cosas que debiera decir, el que no se fue a España... tambien el que nunca perdio la esperanza...
En este momento tan especial de mi vida, en el que parto a vivir lejos durante un tiempo importante, he ido cerrando circulos sin proponermelo demasiado, se han dado ciertas cosas y oportunidades y las he tomado, estaban ahí... Pienso más en lo que he logrado, en lo que he vivido y lo que quiero vivir, pero tambien me llega sutilmente desde el pasado y de mi presente que tambien soy lo que no soy... lo que no he hecho: soy el que no se quedo a vivir en Talca, el que no tuvo toda la claridad necesaria en su momento, el que no dice todo lo que siente, el que no se casó... y el que aún no ha tenido un hijo.
No se trata de ver el vaso medio vacío... se trata de querer llenarlo...
Santiago, Enero 2009.